El cambio climático tiene un impacto directo en la seguridad y en la sostenibilidad de la cadena alimentaria, acarreando nuevos riesgos para los animales y las plantas, y como consecuencia para las personas. Al consumir alimentos, estamos expuestos a enfermedades nuevas o que reaparecen, que pueden provocarnos problemas de salud.

¿Cómo afecta el impacto climático a nuestro planeta?

El Cambio Climático causa variaciones estacionales con temperaturas más altas en verano y más bajas en invierno:

  • Por un lado, el aumento de las temperaturas genera daños tanto en las plantas como en los animales, además de provocar una subida del nivel del mar y una disminución de los recursos hídricos.
  • Por otro lado, el aumento de fenómenos meteorológicos extremos, como sequías e inundaciones, tormentas y heladas, erosiona el suelo y altera su composición.

En conclusión, el cambio climático impacta tanto en los recursos naturales (agua, suelo y aire) provocando su escasez y contaminación, como en las plantas y animales, provocando enfermedades nuevas.

¿Cómo afecta el impacto climático a nuestro planeta?

Los fenómenos meteorológicos extremos y la subida de temperaturas afectan negativamente a:

Agricultura

  • Disminución del rendimiento y de la calidad de los cultivos, que origina mayores pérdidas en los campos y mayor desperdicio de los alimentos cultivados.
  • Aumenta la resistencia de los microorganismos (bacterias, hongos y virus), algunos de los cuales pueden producir micotoxinas que pueden llegar a los alimentos vegetales, causando toxinfecciones alimentarias.
  • Disminución de insectos polinizadores (p.ej. abejas), lo que afectan a la floración de los cultivos.
  • Aumento de plantas tóxicas y de malas hierbas.

Ganadería

  • Estrés térmico de los animales, lo que disminuye su bienestar y su apetito y, por tanto, la producción de alimentos de origen animal.
  • Aumento de enfermedades animales transmitidas por vectores (mosquitos, garrapatas) en los animales, como la lengua azul o la peste porcina.
  • Multiplicación y reaparición de virus, bacterias y parásitos resistentes, afectando a los animales y transmitiéndose a las personas a través de los alimentos.
  • Aumento de resistencias antimicrobianas: Las altas temperaturas locales provocan una mayor incidencia de infecciones con bacterias resistentes a los antibióticos.

Medio acuático (mares, ríos y lagos)

El cambio climático puede potenciar la aparición de sustancias químicas tóxicas en el medio acuático (por ejemplo, concentrándose en los ríos durante las sequías o llegando al mar durante las inundaciones). Estas sustancias afectan a los organismos acuáticos y pueden transmitirse a las personas a través del consumo de pescados y mariscos.

Algunos ejemplos de estos contaminantes químicos son: biotoxinas marinas debido al crecimiento excesivo de algas tóxicas, la aparición de microplásticos y nanoplásticos o de metales pesados en los mares arrastrados por la lluvia.

Consultar Infogramas de riesgos químicos y biológicos en los alimentos

¿Cómo podemos hacer frente al cambio climático?

La FAO aborda el camino que tenemos por delante en los próximos años para hacer frente al cambio climático con una serie de recomendaciones a nivel mundial:

  1. Producción Sostenible de Alimentos: Las buenas prácticas en agricultura y ganadería, tales como el correcto manejo de cultivos y de riego, así como una buena alimentación de los animales y el aprovechamiento de los estiércoles para el abonado, pueden reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
  2. Consumo responsable y sostenible: la elección de alimentos vegetales locales y de temporada, el consumo de pescado procedente de pesca sostenible, la ingesta de carne de manera equilibrada, la reducción del consumo de alimentos procesados y la disminución del desperdicio alimentario pueden contribuir a mitigar los efectos del cambio climático.

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Fecha de creación: 24-01-2023