¿Qué es la alergia a la leche?

La alergia a la leche es una reacción adversa del sistema inmunitario ante las proteínas de la leche de origen animal (vaca, oveja, cabra, …).

¿Por qué se produce alergia a la leche?

Los niño/as, tras la primera ingesta de leche de vaca, reconocen proteínas extrañas, que difieren de las de la leche humana, provocando una respuesta desproporcionado del sistema inmunitario.

La leche de vaca contiene entre 30 y 35 gramos de proteínas, un total de 40 proteínas diferentes, clasificadas entre caseínas (80%) y proteínas del suero (20%). Aunque todas ellas pueden producir alergia, las caseínas son las proteínas con mayor alergenicidad.

* Importante: la leche de cabra y oveja también pueden producir alergias a las personas alérgicas a la leche de vaca, porque sus proteínas son semejantes a las de vaca.

¿A qué personas afecta la alergia a la leche?

La alergia a la leche de vaca puede presentarse en cualquier persona, aunque los niño/as con antecedentes familiares de enfermedades alérgicas poseen mayor predisposición.

La alergia a la leche de vaca es, en la mayoría de los casos, una situación temporal, ya que se inicia en los primeros meses de la vida del bebe, coincidiendo con la introducción de fórmulas adaptadas de leche de vaca tras la lactancia materna, y su prevalencia suele disminuir con la edad.

A los tres años, el 80-85% de los niño/as alérgico/as a la leche de vaca ha adquirido tolerancia. En países desarrollados, la frecuencia de alergia a leche de vaca en la población general representa un 2-3%.

¿Qué diferencia hay entre alergia e intolerancia a la leche?

La alergia a la leche es una respuesta desproporcionada del sistema inmunitario ante las proteínas de la leche, mientras que la intolerancia a la leche es la dificultad de digerir la lactosa (un azúcar de la leche), por la deficiencia de la enzima lactosa, produciendo problemas digestivos.

Además, los síntomas son muy diferentes, las reacciones alérgicas a la leche se producen de forma muy clara y acusada tras la ingesta del alimento con leche, mientras que en la intolerancia a la lactosa, el proceso de rechazo se produce de forma más leve y prologando en el tiempo.

¿Cuáles son los síntomas de la alergia a la leche?

Dependiendo del grado de sensibilidad de las personas y de la cantidad de alérgeno ingerido, se produce síntomas variables y de diferente gravedad:

Signos
 Síntomas
Cutáneos (más frecuentes y menos graves)
  • Urticaria
  • Prurito (picazón)
  • Enrojecimiento de la piel
  • Dermatitis
  • Inflamación de los labios, boca, lengua y cara
 Digestivos (algo frecuentes)
  • Picor de boca y garganta
  • Nauseas, vómitos
  • Diarrea
  • Hinchazón y dolor abdominal
  • Cólicos
Respiratorios (menos frecuentes)
  • Rinitis (moqueo, congestión y/o estornudos)
  • Conjuntivitis
  • Asma (dificultad respiratoria)
  • Sibilancia
Anafilaxia * (muy poco frecuentes, pero muy graves)
  • Intensiva dificultad respiratorio
  • Edema laríngeo
  • Broncoespasmo
  • Asma grave
  • Hipotensión y choque
  • Disminución de conciencia

 

Fuente: Libro de las enfermedades alérgicas. Alergia a la leche. Servicio de Alergia del Hospital La Paz

* A tener en cuenta: Las personas muy sensibles a las proteínas alergénicas de la leche, incluso consumiendo trazas de leche, pueden tener riesgo de reacciones graves o anafilácticas, que aparecen a la de pocos minutos tras la ingestión del alimento, y progresa muy rápidamente manifestándose síntomas muy graves.

¿Cómo se tratan los síntomas?

Las personas que presentan los síntomas descritos anteriormente deben acudir inmediatamente al médico que le administrará la medicación oportuna y les remitirá a un alergólogo para que determine y confirme la alergia a la leche y/u otro alimento.

Consejos para personas alérgicas a la leche

  • Evitar el consumo de leche y derivados lácteos y productos transformados que puedan llevar proteínas lácteas como ingrediente.
  • Consumir alimentos ricos en calcio para asegurar su aporte en la dieta: frutos secos, legumbres, pescados azules y vegetales de hoja verde. Además, conviene consumir alimentos ricos en vitamina D (necesaria para la absorción de calcio) como huevos, carne y pescado.
  • Leer bien las etiquetas de los alimentos. Aunque la leche se debe mencionar en el etiquetado por normativa obligatoria, muchos alimentos transformados etiquetados como no lácteos pueden contener las proteínas alergénicas de la leche. Si existe duda, evitar consumir dicho alimento.
  • Limpiar y desinfectar todas las superficies de trabajo y los utensilios. No usar aceite que se haya utilizado previamente para cocinar otros alimentos con leche (torrijas, croquetas, etc.)
  • Comunicar que se es alérgico/a en todos los lugares donde se vaya a comer (comedor escolar, restaurantes, excursiones, hospitales, viajes) para evitar que se sirvan alimentos lácteos.
  • Tener a mano la medicación pautada por el alergólogo en caso de reacción alérgica.

¿Qué alimentos se pueden consumir de forma segura?

A continuación, se detallan las listas de alimentos que se pueden consumir, identificados según los colores del semáforo:

  • Verde: se pueden comer de forma segura porque no llevan leche.
  • Naranja: pueden contener leche o trazas de leche, por lo que se recomienda siempre mirar en la etiqueta si aparece su mención.
  • Rojo: no se pueden comer porque llevan leche.

* Recuerda: Los listados se ofrecen a título orientativo y pueden no ser exhaustivos. Esta información no debe sustituir nunca los consejos y recomendaciones de tu alergólogo

 

 

Alimentos permitidos
  • Bebidas y derivados a base de vegetales: soja, coco, avena, arroz, almendras
  • Frutos secos
  • Legumbres
  • Carnes
  • Pescados y mariscos
  • Frutas y verduras
  • Cereales
  • Huevos
  • Miel
  • Pasta
Alimentos a comprobar su etiqueta
  • Leche de proteínas hidrolizadas
  • Caramelos y golosinas
  • Embutidos: jamón york, mortadela, etc.
  • Productos cárnicos como patés, albóndigas, hamburguesas, salchichas, etc.
  • Sucedáneos de café, chocolate y cacao y otras bebidas de máquina
  • Zumos de fruta
  • Purés y sopas
  • Pan
  • Pasteles y bollería
  • Pasteles y frituras de carne
  • Precocinados
  • Cereales enriquecidos
  • Ponches y malteados
  • Rebozados
  • Sopas instantáneas
  • Bebidas espiritosas
  • Vino y sidra
Alimentos prohibidos
  • Leche de vaca y leche en polvo
  • Fórmulas adaptadas de leche
  • Yogur y otros derivados lácteos fermentados
  • Quesos, requesón, suero, cuajada, crema de leche
  • Mantequilla, nata, margarinas
  • Batidos, horchatas, helados y sorbetes
  • Flanes, natillas
  • Postres lácteos: arroz con leche, pastel de arroz
  • Bollería que contenga leche o derivados lácteos: Donuts, tortitas, crepes, bollos, bizcochos, galletas, pastas, tostadas, etc.
  • Productos de pastelería: Pasteles, tartas, bizcochos
  • Potitos, papillas y cereales
  • Embutidos que contengan productos lácteos: jamón york, mortadela, salchichas, lomo, chorizo
  • Pasteles y frituras de carne y pescado
  • Huevos guisados con leche o con derivados lácteos
  • Bechamel y salsa elaboradas con leche y los producto que las contengan (ej. croquetas)
  • Puré de patatas, platos preparados de pastas
  • Cremas, purés y sopas preparados con leche o productos lácteos
  • Aderezos de ensaladas y mayonesas que contengan leche o derivados lácteos
  • Cacao, chocolate, sucedáneos de chocolate, turrones
  • Alimentos fritos con mantequilla o pasta para rebozar
  • Grageas de sucedáneos de chocolate
  • Pan tostado, pan de molde y baguettes
Fuentes:
Listado exclusión dieta leche- Asociación de alérgicos a alimentos y látex de Cataluña- INMUNITAS VERA 2011
Dieta para para alérgicos a proteínas de vacuno – Hospital La Fe
Normas dietéticas para alérgicos a proteínas de leche de vaca – Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergia y Asma Pediátrica SEICAP

Enlaces de interés

 

Fecha de creación: 04-06-2014